Padre Cristóbal Szwernicki (1814-1894)

El Padre Krzysztof Szwernicki (alias Szwermicki), hijo de Adam y Katarzyna nee Woclawska, nación en 1814 en el pueblo de Worpuniany, Diócesis y Provincia de Augustow. Asistió durante tres años a un colegio de estudios secundarios en Mariampole, completándolo en el año 1824.

Seguidamente, estudió en una escuela media dirigida por los Padres Marianos en el monasterio de Mariampole. Por lo tanto, con tan sólo 10 años de edad, tomó residencia en el monasterio. Allí, en 1832, terminó su enseñanza media, que comprendía un programa lego de estudios

Para esta época ingresó en la Orden, completando luego el Noviciado y profesando sus votos religiosos. Los estudios de filosofía y teología también los desarrolló en Mariampole, guiado por los mismos Marianos. El Noviciado y los posteriores estudios duraron, como de costumbre, cinco años. Fue ordenado sacerdote en Sejny, el 24 de diciembre de 1837, por el Obispo Pawel Straszynski (1784-1847), que había sido consagrado Obispo en Varsovia, el 8 de enero del mismo año y que, como primer Obispo de Sejny, tomó allí su residencia permanente.

Durante los dos siguientes años, el Padre Szwernicki dictó clases a los seminaristas en la Casa de Estudios de Mariampole, y se desempeñó como Vice Maestro de Novicios (en otras palabras, fue el Superior de la Casa de Estudios y el Educador de los seminaristas).

Debido al deseo del Obispo, y siguiendo las órdenes de sus Superiores, el Padre Szwernicki partió para Varsovia en 1839, para aprender métodos de enseñanza en el Instituto para Sordos.

Habiendo regresado a Mariampole dos años después, organizó y dirigió allí una escuela para los jóvenes que padecían de sordera.

El Padre Szwernicki, como él mismo declaraba, hablaba en los siguientes lenguajes: polaco, latín, lituano, francés, alemán y ruso.

El Capítulo General de los Marianos en 1884 lo eligió Superior del Monasterio de Mariampole. Ocupó este cargo tan sólo durante dos años y medio.

El 6 de diciembre de 1846 fue arrestado, llevado a Varsovia, introducido en la "ciudadela de Alejandro", y juzgado por una corte marcial. Debió pasar cinco años en el anexo Nº 10 de la "ciudadela" de Varsovia, todo el tiempo bajo estricta vigilancia, sin ninguna posibilidad de defenderse. Fue acusado por presuntamente haber recibido libros prohibidos procedentes de Prusia. Debido a esta acusación, fue exiliado a la provincia de Irkutsk. Salió de Varsovia el 23 de marzo de 1852, junto con otros convictos que eran transportados a Siberia. Cuando llegó a Irkutsk, obtuvo el permiso para cumplir las tareas sacerdotales en la iglesia local.

Por un edicto del Zar con ocasión de la coronación el 17 de noviembre de 1855, se le permitió al Padre Szwernicki volver a su patria. Sin embargo, siguiendo el deseo de los parroquianos, permaneció voluntariamente en Irkutsk. Por un decreto dado por el Metropolita de Mohylew el 10 de diciembre de 1855, quedó como párroco de Irkutsk y capellán de la armada. Esto fue confirmado por los oficiales del Estado el 26 de junio de 1856.

Como capellán, el Padre Szwernicki tomó bajo su cuidado pastoral a los soldados católicos de los países católicos conquistados como Polonia y Lituania. Estos sirvieron al Zar durante muchos años, y fueron ubicados en guarniciones remotas, a miles de kilómetros de su tierra natal. El Padre Szwernicki también los acompañó durante la guerra en Crimea entre 1853 y 1856.

El Consistorio de Mohylew, en una decisión tomada el 13 de mayo de 1857, premió al Padre Szwernicki con una cruz y una medalla por su participación en la guerra de Crimea. Por un decreto del Zar del 20 de abril de 1870, fue condecorado con la medalla de tercera clase de San Estanislao, en reconocimiento a su fidelidad y devoción, al mismo tiempo que por el valioso cumplimiento de sus deberes. Por los mismos motivos, el zar le concedió la medalla de tercera clase de Santa Ana, el 10 de agosto de 1878.

Por propio pedido, el Padre Szwernicki fue liberado de sus responsabilidades debido a su enfermedad. El Metropolita de Mohylew lo dispensó con el decreto Nº 1067 del 14 de julio de 1885. Sin embargo, como su sucesor no llegaba y la salud del Padre Szwernicki mejoró, por decreto Nº 599 del 22 de marzo de 1886, el Metropolita le concedió nuevamente sus anteriores tareas, siguiendo su propio pedido y el de los parroquianos.

La parroquia del Padre Szwernicki ocupaba el área de Siberia desde el ártico hasta China. Comenzando en la primavera de 1859, siguió haciendo periódicamente visitas a sus parroquianos, estando en camino varios meses durante el año.

Los exiliados y los colonos deportados que no tenían el derecho a regresar a sus hogares, encontraron apoyo espiritual y auxilio en su rectoría. Frecuentemente, algunos sacerdotes permanecían en la rectoría colaborando con el ministerio. Un joven, líder de la sublevación, Jozef Kalinowski, hoy conocido como San Rafael Kalinowski, también experimentó la hospitalidad del Padre Szwernicki.

En 1879, el Padre Szwernicki fue testigo del gran incendio de la ciudad, en el cual su iglesia también pereció junto con la rectoría. Sin embargo, en poco tiempo fue capaz de construir una nueva iglesia. Y también construyó y condujo un orfanato para los hijos de los deportados.

No obstante su completa abnegación en favor de los necesitados, en enero de 1894 fue brutalmente atacado y golpeado por algunos bandidos. No se recuperó de las lesiones y murió el 26 de noviembre del mismo año. El Padre Szwernicki fue enterrado en la iglesia de Irkutsk que él mismo había construido. Desafortunadamente, la ubicación de su tumba aún es desconocida. También fue imposible recobrar la iglesia, tomada por los comunistas. Sin embargo, en la actualidad hay en Irkutsk una diócesis católica, en la cual hay una catedral erigida por el Obispo local.